TELEVISIÓN
“No me hago cargo de los prejuicios”
La modelo, que ganó por primera vez en “Tu cara me suena” (Telefe), asegura que lo que más le gusta es tomar nuevos riesgos.
21.11.2013
Disfrazar sus ojos turquesa, dorarse la piel, pintarse tatuajes, apelar a una frondosa peluca, calcar tics y cantar en perfecto inglés. Todo ese complejo proceso le redituó su primera victoria. Rocío Guirao Díaz ganó esta semana en la gala de Tu cara me suena (Telefe) con el personaje con el que menos esperaba triunfar, Nicki Minaj, la rapera de Trinidad y Tobago que explotó en el mundo a fuerza de versitos pegajosos y estética camaleónica. “Fue un mimo al esfuerzo”, considera la rubia y pone los puntos: “¿ Bailando por un sueño 2014?
¡No! Ya estuve tres años en Ideas del Sur y fue una experiencia divina, pero estoy en otra etapa de mi carrera. Hoy no elijo un programa con tanta exposición”.
Guirao Díaz está instalada en Rosario, pero pasa dos días a la semana en Buenos Aires para las grabaciones de Tu cara... En Santa Fe vive entre pinos y eucaliptos, cuida de su huerta y su naranjo, y de que la televisión no destruya lo que hoy más le importa: su esquema familiar. “En Buenos Aires me expongo, pero en mi base, Rosario, logro mi cable a tierra rodeada de naturaleza y de mis dos hijos. Mi marido trabaja allá y cuando yo vivía en Buenos Aires estábamos separados muchos días, así que decidimos que eso no suceda más. En Rosario soy otra, tengo mi costado empresarial, mi marca de ropa. Es lo que elijo. Mi marido jamás me impuso cambiar el ritmo”.
A los 29 años -y con 15 como modelo-, esta vez quiso subir la apuesta y se metió en el ciclo que conduce Marley para jugar a transformarse y a la vez formarse. “Estoy aprendiendo como nunca. Esto es como una escuela. Esta experiencia me queda para siempre. Es un desafío como artista al que le estoy sacando el mayor jugo posible”, se entusiasma. “Para componer a Miley Cyrus, por ejemplo, quien tiene 24 tatuajes, me pintaron los 24 tatuajes artesanalmente. Es un proceso complejo de máscaras, pelo, uñas y un entrenamiento vocal y de tics”.
Después de su incursión en el teatro convocada por Aníbal Pachano en Pour la gallery, y luego de haberse acercado al teatro infantil, dice que no busca un rótulo que la saque del oficio de modelo: “No me hago cargo de los prejuicios del otro. Soy una modelo que se anima a hacer un montón de cosas. Me arriesgo”. Estos días evalúa tres tipos de propuesta: “Ponerme las plumas, meterme más en lo actoral o ser bailarina. Veré qué nuevo desafío quiero”.
Semanas atrás una marca de lencería dio a conocer un video de distintos conjuntos de ropa interior que la rubia protagoniza junto a Pampita Ardohain. Fuera de las pasarelas y de las fantasías colectivas, la muchachita parece haber impuesto respeto en el medio. “Una cosecha lo que siembra y todo es producto de eso. Tengo la familia que luché para tener y voy ganando los lugares que peleo por ganar. No es suerte, todo es producto del trabajo”.
“No me hago cargo de los prejuicios”
La modelo, que ganó por primera vez en “Tu cara me suena” (Telefe), asegura que lo que más le gusta es tomar nuevos riesgos.
21.11.2013
Disfrazar sus ojos turquesa, dorarse la piel, pintarse tatuajes, apelar a una frondosa peluca, calcar tics y cantar en perfecto inglés. Todo ese complejo proceso le redituó su primera victoria. Rocío Guirao Díaz ganó esta semana en la gala de Tu cara me suena (Telefe) con el personaje con el que menos esperaba triunfar, Nicki Minaj, la rapera de Trinidad y Tobago que explotó en el mundo a fuerza de versitos pegajosos y estética camaleónica. “Fue un mimo al esfuerzo”, considera la rubia y pone los puntos: “¿ Bailando por un sueño 2014?
¡No! Ya estuve tres años en Ideas del Sur y fue una experiencia divina, pero estoy en otra etapa de mi carrera. Hoy no elijo un programa con tanta exposición”.
Guirao Díaz está instalada en Rosario, pero pasa dos días a la semana en Buenos Aires para las grabaciones de Tu cara... En Santa Fe vive entre pinos y eucaliptos, cuida de su huerta y su naranjo, y de que la televisión no destruya lo que hoy más le importa: su esquema familiar. “En Buenos Aires me expongo, pero en mi base, Rosario, logro mi cable a tierra rodeada de naturaleza y de mis dos hijos. Mi marido trabaja allá y cuando yo vivía en Buenos Aires estábamos separados muchos días, así que decidimos que eso no suceda más. En Rosario soy otra, tengo mi costado empresarial, mi marca de ropa. Es lo que elijo. Mi marido jamás me impuso cambiar el ritmo”.
A los 29 años -y con 15 como modelo-, esta vez quiso subir la apuesta y se metió en el ciclo que conduce Marley para jugar a transformarse y a la vez formarse. “Estoy aprendiendo como nunca. Esto es como una escuela. Esta experiencia me queda para siempre. Es un desafío como artista al que le estoy sacando el mayor jugo posible”, se entusiasma. “Para componer a Miley Cyrus, por ejemplo, quien tiene 24 tatuajes, me pintaron los 24 tatuajes artesanalmente. Es un proceso complejo de máscaras, pelo, uñas y un entrenamiento vocal y de tics”.
Después de su incursión en el teatro convocada por Aníbal Pachano en Pour la gallery, y luego de haberse acercado al teatro infantil, dice que no busca un rótulo que la saque del oficio de modelo: “No me hago cargo de los prejuicios del otro. Soy una modelo que se anima a hacer un montón de cosas. Me arriesgo”. Estos días evalúa tres tipos de propuesta: “Ponerme las plumas, meterme más en lo actoral o ser bailarina. Veré qué nuevo desafío quiero”.
Semanas atrás una marca de lencería dio a conocer un video de distintos conjuntos de ropa interior que la rubia protagoniza junto a Pampita Ardohain. Fuera de las pasarelas y de las fantasías colectivas, la muchachita parece haber impuesto respeto en el medio. “Una cosecha lo que siembra y todo es producto de eso. Tengo la familia que luché para tener y voy ganando los lugares que peleo por ganar. No es suerte, todo es producto del trabajo”.
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